Los policías acusados por el asesinato de Lucas González afirman que actuaron en legítima defensa

Otros 11 acusados deberán declarar por el encubrimiento del hecho para tratar de hacerlo pasar como un enfrentamiento con delincuentes y aplicación de torturas.

Los policías acusados por el asesinato de Lucas González afirman que actuaron en legítima defensa. Se trata de tres efectivos de la Policía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, quienes están acusados del asesinato del joven de 17 años que volvía de entrenar del club Barracas Central en noviembre de 2021. Los imputados sostuvieron se encuentran acusados por homicidio y encubrimiento del hecho.

El inspector Gabriel Alejandro Issasi (41), el oficial mayor Fabián Andrés López (48) y el oficial Juan José Nieva (37) aseguraron que actuaron “en cumplimiento del deber” y no aceptaron responder preguntas. Issasi sostuvo que fue un oficial condecorado y ejerció su función durante su extensa carrera. “Quiero agregar que en este hecho actué en el cumplimento del deber, que ejercí la legitima defensa y que no cometí ningún delito”, expresó. Nievas por su parte, dijo que actuó “en legítima defensa” y no cometió “ningún delito”. López indicó: “en este hecho cumplí con mi deber, ejercí legítima defensa y no cometí ningún delito”.

11 acusados continuarán declarando por el encubrimiento del hecho para tratar de hacerlo pasar como un enfrentamiento con delincuentes y por las torturas a las que sometieron a los tres amigos de Lucas.

Issasi, Nievas y López integraban la Divsión Brigadas y Sumarios de la Comuna 4 de la Policía de la Ciudad. Afrontan una acusación por “homicidio agravado por haber sido cometido con alevosía, por placer, por odio racial, por el concurso premeditado de dos o más personas y por cometerse abusando de su función o cargo por un miembro de una fuerza policial” en el caso de Lucas González y “tentativa de homicidio agravado, falsedad ideológica y privación ilegal de la libertad agravada por abuso funcional y sin previsión de la ley” en el caso de sus amigos.

Los restantes 11 acusados afrontan causas por “falsedad ideológica, privación ilegal de la libertad agravada por abuso funcional y sin previsión de la ley, encubrimiento agravado por la condición de funcionarios públicos y por ser el delito precedente especialmente grave e imposición de torturas” y, en el caso de Cuevas e Inca también por “falso testimonio agravado por haber sido cometido en una causa penal y en perjuicio de los imputados”.

El asesinato de Lucas

En la mañana del 17 de noviembre de 2021 Lucas González y tres amigos volvían de entrenar en el club Barracas Central en un Volkswagen Suran del padre de uno de ellos hacia Florencio Varela. Después de detenerse en un kiosco un Nissan Tiida comenzó a perseguirlos. En el interior de este vehículo viajaban tres policías de la Brigada 6 de la Comisaría Vecinal 4D que realizaban tareas de campo sin uniforme ni baliza.

Los jóvenes intentaron escapar al creer que se trataba de ladrones. Los efectivos policiales dispararon contra el vehículo y uno de los disparos impactó en la cabeza de Lucas. El joven murió al día siguiente en el Hospital El Cruce de Florencio Varela.

Según revela la investigación, los policías informaron al servicio de comunicaciones policiales que perseguían un automóvil con “cuatro masculinos con apariencia de menores, jóvenes”, que “estaban armados” y procedieron a detenerlos.

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