A 8 años del primer “Ni una menos”, ya mataron a 2500 mujeres
Dos observatorios difundieron las cifras de femicidios que se produjeron desde el 2015, año en el que mataron a Chiara Páez.
En los últimos ocho años, más de 2500 mujeres fueron víctimas de femicidio en todo el país, según un informe especial presentado por la organización feminista “La Casa del Encuentro”. Estas alarmantes cifras revelan la persistencia y la gravedad de la violencia de género en la sociedad.
El informe destaca un caso que marcó un punto de inflexión en la lucha contra el femicidio en Argentina: el asesinato de Chiara Páez, una adolescente de 14 años en la ciudad santafesina de Rufino en mayo de 2015. Su trágica muerte fue el catalizador de las primeras marchas del movimiento “Ni Una Menos” el 3 de junio de ese año.
Femicidios en Argentina
El informe de La Casa del Encuentro revela que entre junio del 2015 y mayo del 2023 se registraron 2554 femicidios, incluyendo 214 casos vinculados y 58 transfemicidios. Estos crímenes dejaron a 2691 hijas e hijos sin madre, la mayoría de ellos niños y adolescentes.
OBSERVATORIO DE FEMICIDIOS EN ARGENTINA
“ADRIANA MARISEL ZAMBRANO"
Coordinado por La Asociación Civil La Casa del Encuentro.A 8 años de “Ni Una Menos”
2554 Víctimas#NiUnaMenos @MinGenerosAR @EstelaEDiaz @AyelenMazzina pic.twitter.com/zb15gLjlQj
— La Casa del Encuentro (@Casadelencuentr) June 1, 2023
La información recopilada muestra que el 61 por ciento de las víctimas (1558 casos) fueron asesinadas por sus parejas o exparejas, y la mayoría de los femicidios ocurrieron en el entorno doméstico.
A nivel geográfico, las provincias con los mayores valores absolutos de femicidios fueron Buenos Aires (808 casos), Santa Fe (266), Córdoba (199) y Salta (122).
El informe también revela que el 26 por ciento de las mujeres asesinadas (664 casos) fueron víctimas de disparos, el 21% (536 casos) murieron por heridas de arma blanca y el 11% (281 casos) presentaba indicios de abuso sexual.
Es especialmente preocupante que el 15% de las víctimas (383 casos) había realizado denuncias previas contra sus agresores. Además, se destaca que el 5 por ciento de las mujeres asesinadas eran migrantes y el 3% estaba embarazada.
El informe también arroja luz sobre la conducta de los femicidas, revelando que el 16 por ciento de ellos (408 casos) se suicidaron después de cometer el femicidio. Además, el 6% (153 casos) tenía una medida cautelar en su contra y otro 6% (153 casos) formaba parte de alguna fuerza de seguridad.
El análisis realizado por La Casa del Encuentro pone un enfoque particular en la edad de las víctimas, señalando que el 66% de las mujeres asesinadas tenían entre 19 y 50 años. Además, se destaca la vulnerabilidad de las adolescentes, con un total de 121 femicidios registrados en ese grupo de edad.
Otra organización, MuMaLá-Mujeres de la Matria Latinoamericana, también presentó sus cifras de femicidios durante los últimos ocho años, informando que se produjeron 2209 asesinatos de mujeres entre el 2015 y el 2023.
Es importante destacar que las diferencias en las cifras de ambas organizaciones se deben a diferentes protocolos y criterios utilizados para definir un asesinato como “femicidio”.
Los dos observatorios se basan sus estadísticas principalmente en publicaciones periodísticas y tienen como objetivo visibilizar los hechos de violencia de género.
El primer “Ni una menos”
Los restos de Chiara, de 14 años, fueron encontrados enterrados en el jardín de la casa de su novio, Manuel Mansilla, de 16. Luego se supo que la adolescente de Rufino, Santa Fe, estaba embarazada de tres meses y no quería abortar a pedido de su pareja y por eso él la asesinó a golpes.
El femicidio de Chiara no fue un caso aislado de violencia de género: a partir de su mediatización se empezó a analizar y registrar ese tipo de homicidios con perspectiva de género.
Marchas por “Ni una menos” en todo el país
A ocho años del Ni una menos, colectivos feministas de todo el país marcharán entre hoy y mañana en reclamo contra femicidios irresueltos y violencia de género.
La consigna de este año será: “Vivas, libres y desendeudadas nos queremos. Con este Poder Judicial no hay Ni una menos”. Se reclama, entre otras cosas, la necesidad de autonomía económica y de una “reforma judicial feminista”.