Food Surfing: La Casona de Belgrano
Viole Brodsky visita una cantina de club con una vuelta gourmet.
Los bodegones de barrio llevan en su esencia una tradición: la de la comida abundante y casera. Esta semana en Food Surfing, Viole Brodsky nos presenta un bodegón muy especial: La Casona de Belgrano. Ubicada en Alberdi, esta casona se encuentra frene a la cancha del club que le da nombre.
“Antes ellos estaban adentro de la cancha, después hicieron la nueva tribuna y tuvieron que moverse de lugar”, explicó Viole. Este bodegón-restaurante era lo que se conoce como la cantina del club. “Lleva a un público súper amplio, muy familiar, obviamente están todos los hinchas, hay jugadores que van, hacen incluso algunas reuniones ahí”, agregó.
La Casona abre de lunes a viernes desde la mañana hasta la tarde – 9 a 18 hs. – y los fines de semana sólo los sábados – 9 a 13.30 hs. – en la calle Arturo Orgáz 501. Se instalaron allí hace cerca de cinco años y tienen planes de volver a estar dentro del club. “Es como estas casas de Alberdi que a mí me dio la sensación como de un antiguo almacén de ramos generales, de puertas altas, ladrillo a la vista, rústico de verdad”, comparó. Su interior está decorado con imágenes de las diferentes formaciones de la primera del club.
Para desayunar tiene las opciones clásicas como el café con leche y medialunas o un desayuno más natural. “Los precios están muy bien, muy de cantina de club, lo que uno espera pagar”, contó. los menúes cambian todas las semanas y está conformado por un plato que incluye bebida y postre y una alternativa de ensalada que es fija. Todas las semanas a través de Instagram puede conocerse el plato de la semana.
El menú del día para no socios sale $2450 mientras que para quienes estén asociados al Club Belgrano tiene un precio de $1950. El chef a cargo de La Casona de Belgrano es Sergio Blanco, conocido por su trabajo en San Honorato. “Los platos son como les decía abundantes, se come bien y por otro lado, tiene como una mini vueltita, quizás hasta gourmet”, contó Viole.
Dentro de los platos que destacó se encontraron los canelones y el flan casero. Además, contó que las propuestas de ensaladas se adaptan a la estación con, por ejemplo, calabacín, trigo burgol y croquetas de ternera. El menú de los días viernes es bife de chorizo, acompañado por diferentes salsas y guarniciones.
“Es un lugar que incluso uno puede ir hasta a trabajar con la compu porque es dentro de todo tranquilo, obviamente, súper familiar”, contó Viole. Obviamente los partidos del Pirata son una de las excusas más habituales para reunirse en La Casona de Belgrano. “Es lindo para el hincha ir a ver también todos estos cuadros y un poco más de la historia del club, más allá de la comida”, agregó.
Escuchá la columna completa ACÁ:
+ NOTIFY: Food Surfing: Mármol siglo 17
+ NOTIFY: Food Surfing: Bagna Cauda