El Gobierno revisará las tareas de la base espacial china en Neuquén
Evalúan verificar el cumplimiento de acuerdos en la base construida entre 2014 y 2017.
Este martes, surgió la posibilidad de que el gobierno de Javier Milei considere solicitar una inspección técnica a la base espacial china ubicada en Bajada del Agrio, provincia de Neuquén. Esta base, construida entre los años 2014 y 2017, ha generado interrogantes sobre su funcionamiento y el cumplimiento de los acuerdos establecidos.
Según reportes de Infobae, la intención de esta inspección sería verificar el respeto al contrato que le concedió a China el uso de este terreno de aproximadamente 200 hectáreas por un período de 50 años. Específicamente, se busca garantizar el cumplimiento del acuerdo que estipula que el 10% de los recursos deben ser destinados por Argentina.
Este movimiento ocurre en un momento en el que la generala Laura Richardson, a cargo del Comando Sur de Estados Unidos, se encuentra de visita en el país. Además, el embajador estadounidense en Argentina, Marc Stanley, expresó su “sorpresa” por permitir que las Fuerzas Armadas chinas operen en Neuquén, en secreto y con propósitos inciertos.
La base espacial en cuestión fue establecida mediante acuerdos entre la China Satellite Launch and Tracking Control General (CLTC), la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE), la provincia de Neuquén, y los gobiernos de Argentina y China. Equipada con una antena de 35 metros de diámetro, la estación está destinada a misiones de exploración del espacio profundo y forma parte de la red de estaciones de China.
Aunque siempre han existido especulaciones sobre los verdaderos objetivos de la base, se afirma que su uso dual, tanto para la observación astronómica como para el seguimiento de satélites con fines militares, fue prohibido por una adenda al convenio original. No obstante, expertos señalan que esta restricción ya estaba contemplada en el contrato original firmado durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner.
El gobierno de Milei busca, mediante una inspección técnica, esclarecer las actividades y el cumplimiento de los acuerdos en la base espacial china en Neuquén, en un contexto de creciente interés por parte de Estados Unidos y preocupación por posibles implicaciones estratégicas.