Paro general: adhesión dispar y tensión entre la CGT y el Gobierno

El paro general convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) para este jueves 9 de mayo tuvo una adhesión dispar en todo el país. Si bien se observó un alto nivel de acatamiento en sectores como el transporte y la industria fabril, la mayoría de los comercios decidieron abrir sus puertas con normalidad.

En el caso del transporte, solo circularon algunas líneas de colectivos pero con una baja cantidad de pasajeros. La actividad fabril también se vio fuertemente afectada, con la suspensión de la producción en la mayoría de las plantas.

Sin embargo, la situación fue diferente en el sector comercial. La Cámara de Comercio (CAC) estimó que entre el 70 y el 80 % de los locales mantuvieron su actividad normalmente. En este sentido, el presidente de la CAC, Jorge Brito, señaló que “el paro no tuvo el impacto que se esperaba” y que “la mayoría de los empresarios decidió no acatar la medida”.

Desde la CGT, se consideró que la huelga fue “contundente” y se exigió al Gobierno mantener el diálogo abierto para abordar las problemáticas que aquejan al sector laboral. El secretario general de la central obrera, Héctor Daer, afirmó que “el paro ha demostrado la unidad y la fuerza del movimiento obrero” y que “el Gobierno debe escuchar nuestro reclamo”.

Por su parte, desde el Ejecutivo minimizaron el impacto del paro y criticaron duramente la medida. El ministro de Economía, Sergio Massa, señaló que “el paro no ha tenido un impacto significativo en la economía” y que “la CGT debería reconsiderar su postura y volver al diálogo”.