Brasil: Inundaciones en Rio Grande do Sul dejan 75 muertos, 101 desaparecidos y 80.000 evacuados

 La situación en el sur de Brasil empeora por hora debido a las intensas lluvias que han provocado inundaciones de magnitud sin precedentes en el estado de Rio Grande do Sul. Las autoridades luchan contra el tiempo para evitar una tragedia aún mayor, mientras el número de víctimas fatales asciende a 75, con 101 personas desaparecidas y 80.000 evacuadas.

Destrucción incalculable y cifras que podrían aumentar

Si bien las precipitaciones han cesado temporalmente en Porto Alegre, la capital del estado, las aguas continúan avanzando de manera incontenible sobre la metrópoli. El nivel del río Guaíba ha superado el récord histórico de 1941, alcanzando los 5,30 metros. La destrucción causada por las inundaciones es incalculable, según Defensa Civil.

El número de personas desaparecidas sigue en aumento, con 101 casos registrados hasta el momento. A esto se suman 155 heridos y 80.500 personas que han tenido que abandonar sus hogares, de las cuales 15.000 se encuentran en refugios. El aislamiento de algunos municipios genera preocupación por la posibilidad de que las cifras reales sean aún más trágicas.

Un estado en estado de emergencia

El gobernador Eduardo Leite ha calificado la situación como “dramática” y “absolutamente sin precedentes”. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva visitará el estado por segunda vez desde que se declaró la emergencia. El ministro de Comunicación de la Presidencia, Paulo Pimenta, ha señalado que este domingo “será un día clave para los rescates”.

Leite ha afirmado que el estado necesitará un “Plan Marshall” para su reconstrucción, pero esto tendrá que esperar hasta que las aguas bajen y las lluvias cesen. La prioridad actual es garantizar el abastecimiento de víveres y la continuidad de la cadena productiva en este estado agropecuario, que cuenta con el quinto PIB de Brasil y es uno de los más pujantes del país.

Una ciudad sitiada y servicios básicos colapsados

La ciudad de Porto Alegre se encuentra prácticamente sitiada debido a las inundaciones. La Policía Rodoviaria ha informado que el acceso desde el sur está cortado a unos 15 km de distancia, mientras que por el norte aún es posible llegar a la ciudad. El aeropuerto internacional de Porto Alegre ha suspendido sus operaciones por tiempo indefinido y la electricidad se ha cortado en varias zonas. Más de un millón de hogares en la región no tienen agua potable.

El alcalde de Porto Alegre, Sebastião Melo, ha urgido a la población a racionar el agua, ya que cuatro de las seis plantas de tratamiento de la ciudad han tenido que cerrar.