Me gusta pero no me atrae al momento del sexo

¿Qué pasa cuando alguien no te gusta físicamente pero gran parte del resto sí? La opinión de la Lic. Noelia Benedetto.

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Atracción — Me gusta pero no me atrae al momento del sexo.

“Estoy con alguien que me gusta, pero que no me atrae físicamente, al momento del sexo cierro los ojos”.

“¿Qué pasa cuando alguien no te gusta físicamente pero gran parte del resto sí? La pasas muy bien, pero cuando llega el momento del erotismo, tenés que cerrar los ojos y pensar en otra cosa, y después la pasas bien también”.

Es totalmente posible que una persona te “guste mucho”, pero que no te atraiga físicamente. O de estar con alguien que antes sí que te atraía físicamente y luego de algún cambio corporal ya no. Socioculturalmente tiene más aceptación vincularse con personas que se acercan a los cánones de belleza, pero el atractivo físico no necesariamente es sinónimo de hegemonía, aquí no aclara por qué no le atrae físicamente.

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Para empezar, hay que dejar en claro que existen distintos tipos de atracción y que no necesariamente entran en juego todas, ni todas al mismo tiempo al momento de vincularnos. En las relaciones sexuales intervienen muchos factores, el atractivo físico es uno de ellos pero no el único, que puede inclusive ni figurar.

Atracción romántica: activación afectiva relacionada con el amor, puede incluir deseo de proximidad, admiración y ternura, llegando incluso al estado de enamoramiento.
Atracción sexual: es la atracción erótica, implica pasión, deseo de un mayor contacto físico y sexual.
Atracción amical: consiste en el deseo de compartir momentos con una persona a la que consideramos amiga.
Atracción sentimental: implica la manifestación de afectos intensos, pero no de carácter romántico, es decir, sin llegar al enamoramiento.
Atracción sensorial: se trata de personas que generan deseos de cercanía y exploración desde lo sensorial: tacto, vista (abrazables, besables).
Atracción intelectual: sentirse atraída hacia personas por su inteligencia, pensamiento y capacidades cognitivas.
Atracción estética: por el aspecto físico o la presentación superficial de algo o alguien.

Puede suceder también lo contrario, que haya personas físicamente atractivas que no nos gusten. Entonces, ¿Cómo se explica? Que hagamos una puesta en valor del atractivo físico no implica que sea condición sine qua non que alguien nos parezca atractivo estéticamente para mantener encuentros sexuales. Existen personas que pueden reprimir o bien restarle importancia a una falta de atracción física durante los encuentros sexuales, pueden enfocarse en cualidades deseables y no en las que les resultan indeseables; se podría dar el caso que tuvieran relaciones sexuales motivadas por la atracción emocional, y no por la física. El mandato social muchas veces plantea el ideal de equilibrio entre todos los tipos de atracciones, pero esto no deja de ser una imposición.

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¿Por qué nos gusta la gente que nos gusta? Hay varios factores que influyen en la atracción:

Proximidad.
Afectos y sentimientos positivos.
Personalidad “forma de ser”.
Semejanza. Compartir gustos y consumos.
Reciprocidad.
Inteligencia.
Atractivo físico.

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El atractivo estético no es determinante, es algo que podes concluir acerca de muchas personas sin conocerlas, puede facilitar las cosas el hecho de que alguien “te entre por los ojos”, pero no garantiza match en los otros aspectos.

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Por último, si el hecho de no sentir atracción física no representa un problema para vos seguramente no vivas este dato como un inconveniente, podes recurrir a la fantasía y conectarte con lo placentero de la situación, pero si tus pensamientos se focalizan en ello, esto te desconecta, lo vivís con culpa, malestar, angustia, etc., quizás podrías considerar la consulta a un espacio de salud mental.