Investigadores desarrollan un filtro de dióxido de carbono para hogares y oficinas

Un equipo de investigadores desarrolló una tecnología revolucionaria que podría cambiar las reglas del juego: un filtro de aire diseñado para integrarse en los sistemas de ventilación de hogares y oficinas que permite capturar dióxido de carbono directamente del aire que respiramos.

Este nuevo filtro está compuesto por nanofibras de carbono recubiertas con un polímero de polietilenimina que crean una esponja de carbono altamente eficaz. La tecnología permite la captura de dióxido de carbono (CO₂) incluso en concentraciones bajas, lo que la convierte en una solución práctica para su uso en edificios comunes a nivel mundial. Además, se puede limpiar y reutilizar de manera eficiente con energía solar o electricidad de bajo consumo.

El equipo de investigación sometió al filtro a una serie de pruebas exhaustivas para garantizar su eficiencia. En la primera fase, se verificó su capacidad de absorción de carbono al hacer pasar aire con una concentración habitual de dióxido de carbono a través de él. Los resultados fueron positivos.

La siguiente fase de las pruebas evaluó la posibilidad de reutilizar el filtro sin los elevados costos energéticos de las grandes instalaciones de captura de carbono a gran escala. Para ello, se utilizó tanto energía solar como corriente eléctrica de bajo voltaje para liberar el CO₂ capturado, lo que permitió la recuperación del filtro y su reutilización. Este proceso fue limpio y alcanzó una eficiencia de eliminación de carbono del 92,1%.

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