Fantasías sexuales en la vida de pareja

Descifrando el papel de las fantasías en la sexualidad humana y su impacto en las relaciones de pareja.

Por Lic. Noelia Benedetto -MP 8136-. Psicóloga y sexóloga con perspectiva de género. Terapeuta de vínculos sexo afectivos.

En el universo de la sexualidad humana, las fantasías juegan un papel fundamental, transportándonos a escenarios eróticos que pueden o no ser reales. Sin embargo, cuando estas fantasías involucran a alguien más que nuestra pareja, surgen interrogantes: ¿Es normal fantasear con otros durante el acto sexual? ¿Es infidelidad? ¿Debemos preocuparnos?

Alorgasmia: el placer de la mente

Para comprender este fenómeno, es esencial reconocer que las fantasías sexuales son representaciones mentales de deseos y escenarios eróticos. La “alorgasmia” se refiere a la excitación derivada de una fantasía sexual durante el acto sexual. Pensar en alguien más, conocido o no, puede intensificar el placer y facilitar el orgasmo.

Fantasía vs. realidad: la delgada línea

Antiguamente, la alorgasmia era considerada una parafilia o patología, asociada a la infidelidad y perjudicial para la monogamia. Sin embargo, hoy se reconoce como un concepto más amplio que abarca la capacidad de experimentar orgasmos mediante estímulos no genitales, como la mente.

¿Cuándo las fantasías se convierten en un problema?

La inquietud surge cuando estas fantasías afectan la intimidad y conexión emocional con la pareja. Si alguien necesita constantemente fantasías para mantener el interés durante el acto sexual, puede ser señal de algún conflicto, aunque no siempre.

Explorando las razones detrás de las fantasías

Es común que en una relación surjan fantasías sexuales con otras personas. Esto no implica insatisfacción con la pareja actual ni deseos reales de infidelidad. Las razones pueden ser diversas:

  • Búsqueda de variedad y novedad: Tras un tiempo, la excitación inicial puede disminuir, y las personas buscan revitalizar su interés mediante fantasías.
  • Autoexploración: Las fantasías pueden ser una vía para explorar aspectos de la propia sexualidad que no se expresan en la relación actual.

Comunicación y confianza: claves para una relación sana

Es fundamental diferenciar entre fantasías y acciones reales que puedan amenazar la relación. Fantasear con alguien no implica buscar encuentros reales fuera de la relación ni que lo que se fantasea sea placentero en la realidad.

En conclusión, no hay una respuesta única sobre si es “malo” o “normal” fantasear con otros. Cada pareja es única, y lo importante es mantener comunicación, confianza y respeto. Si surgen preocupaciones, buscar ayuda profesional puede ser beneficioso.

En síntesis, fantasear con alguien durante el sexo es común en las relaciones de pareja. Sin embargo, si afectan la intimidad y conexión emocional, es útil explorar las causas y buscar soluciones conjuntas.

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Aclaración: Los titulares se desprenden de las consultas que propone la audiencia en @lic.noeliabenedetto. Este espacio informativo no suplanta a una consulta con un/a profesional de la salud.

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