El Gobierno busca destrabar el conflicto con las universidades
Tras la masiva marcha, el Ejecutivo apuesta al diálogo con las casas de estudio y descarta cierres.
El Gobierno argentino busca apaciguar las aguas tras la masiva marcha universitaria del 23 de abril. En un intento por destrabar las negociaciones por el presupuesto, el Ejecutivo decidió cambiar de interlocutor en el diálogo con las universidades. En lugar del subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, las conversaciones serán encabezadas por el secretario de Educación, Carlos Torrendell.
Desde la Casa Rosada reconocieron el impacto de la movilización federal, la cual consideraron “masiva y transversal a toda la sociedad”. Sin embargo, destacaron que el Gobierno no tiene intenciones de cerrar las universidades, tal como lo expresaron algunos de los participantes en la marcha. No obstante, el Ejecutivo insistió en la necesidad de avanzar con las auditorías en las casas de estudio.
En el ámbito legislativo, la sesión especial convocada por Unión por la Patria para tratar un nuevo marco legal de mayor financiamiento universitario, el regreso del Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) y cambios jubilatorios se vio frustrada por falta de quórum. Parte del bloque de la UCR se negó a participar, lo que resultó decisivo para que la sesión se cayera.
