Comenzó la Semana de la No Dulzura
La iniciativa busca generar conciencia sobre el consumo de azúcar moderado.
Este lunes 25 comenzó la Semana de la No Dulzura. Se trata de una iniciativa que busca crear conciencia sobre la importancia de moderar el consumo de azúcar y generar hábitos saludables. El foco de este año está puesto acompañar la implementación de la Ley de Etiquetado Frontal de Alimentos con mayor información, concientización pública y educación alimentaria en los colegios.
La cuarta edición de la campaña se extenderá hasta el domingo 31 de julio donde, además de promover hábitos saludables se concientizará acerca delas enfermedades crónicas no transmisibles asociadas al consumo elevado de azúcar. El lema de esta edición es “menos super y kioscos, más dietéticas y verdulerías”.
“Aunque no lo veamos, el azúcar está en más de la mitad de los productos de supermercado”, es uno de los textos que acompaña las piezas gráficas de la campaña donde puede verse a animales perfectamente camuflados con su entorno. “¿Sabías que el azúcar se esconde en más de 50 nombres engañosos?”, es otro de los mensajes.
Actualmente, el azúcar se encuentra disfrazado bajo diferentes denominaciones en los envases de los productos. Jarabe de maíz o JMAF, fructosa, sacarosa, sirope de agave, dextrosa, melaza, panela, jarabe de glucosa, concentrado de fruta, son algunas de las denominaciones habituales.
El consumo de azúcar
“El problema no es el azúcar en sí mismo sino su exceso, porque la dosis hace al veneno. En 1800 se estima que el consumo per cápita rondaba un kilo anual, ¡lo mismo que hoy consumimos en 10 días!”, indicó Antonella Robledo Irigoyen, nutricionista impulsora de la Semana De la No Dulzura.
“En Argentina consumimos 115 gramos de azúcar diarios por habitante, el triple de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud, que va de 50 gramos (como límite firme) y 25 gramos para obtener beneficios adicionales. El azúcar es un ingrediente barato para las industrias y aporta más sabor a los productos, pero no es saludable para la población. Favorece la obesidad y otras enfermedades crónicas no transmisibles como la diabetes tipo 2, el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y enfermedades cerebrovasculares, que en su conjunto constituyen la primera causa de muerte en el país”, aportó Luciana Paduano, nutricionista miembro de AADYND (Asociación Argentina de Nutricionistas y Nutricionistas Dietistas).
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