Las manualidades mejoran la salud mental y la satisfacción con la vida

Un estudio revela que dedicarse a actividades creativas mejora la salud mental y la percepción de la vida.

Ya sea tomando fotografías, tejiendo o creando esculturas, las actividades creativas no solo son un pasatiempo, sino también una fuente significativa de bienestar mental. Según un estudio reciente, dedicarse a las manualidades tiene un impacto positivo comparable o incluso superior al que genera tener un empleo en la salud mental y la percepción de que la vida merece la pena.

Investigaciones previas han destacado que la salud, los ingresos y el empleo son factores clave para predecir la satisfacción personal. Sin embargo, científicos de la Universidad Anglia Ruskin del Reino Unido quisieron explorar qué otras actividades podrían influir en la salud mental. “Me interesaba investigar los beneficios de las manualidades para el bienestar porque son accesibles, asequibles y populares”, comenta Helen Keyes, autora principal del estudio.

Keyes y su equipo examinaron más de 7.000 respuestas de la encuesta Taking Part Survey, que evalúa la participación de los ingleses en actividades culturales, deportivas y de ocio. A los participantes se les preguntó sobre su nivel de felicidad, ansiedad, soledad, satisfacción vital y si sentían que su vida tenía sentido. Más de un tercio de los encuestados había realizado alguna actividad artística o artesanal en el último año, como cerámica, pintura, fotografía, carpintería o joyería. Incluso al considerar otros factores como la salud y la situación laboral, los investigadores encontraron que las actividades creativas estaban asociadas a mejores resultados en las medidas de bienestar mental.

Aunque el aumento promedio fue modesto (0,2 en una escala de 10 puntos), la práctica de manualidades resultó ser un predictor más relevante para la percepción de que la vida tiene valor, en comparación con factores más difíciles de cambiar, como el empleo. “La artesanía ofrece una sensación de progreso y autoexpresión que muchas veces no se encuentra en el trabajo”, señaló Keyes. “El orgullo por lo que creas y el ver tu avance en tiempo real son muy gratificantes”.

Los beneficios de las actividades artísticas y artesanales sobre la percepción de que la vida vale la pena fueron 1,6 veces mayores que los relacionados con la situación laboral. Además, estas prácticas también mejoraron la felicidad y la satisfacción con la vida, aunque no tuvieron un impacto significativo en la reducción de la soledad, posiblemente porque muchas manualidades se realizan en solitario. Keyes sugiere que fomentar el arte y la artesanía podría servir como una medida preventiva en salud mental: “Es una victoria fácil; la gente disfruta al hacerlo”.

 

Artículos Relacionados

Volver al botón superior