Noches más cálidas: el impacto del cambio climático en la salud de millones

El calentamiento global está causando un aumento preocupante de las temperaturas nocturnas, afectando la vida de miles de millones de personas en todo el planeta. Los especialistas advierten que este fenómeno podría desencadenar serias consecuencias para la salud pública, debido al calor extremo y las alteraciones en los patrones de sueño.

Un análisis reciente de Climate Central reveló que 2.400 millones de personas al año experimentaron al menos dos semanas adicionales con temperaturas mínimas que superan los 25 °C, una tendencia directamente relacionada con el cambio climático.

El estudio demuestra que cada vez más noches registran temperaturas que superan los umbrales considerados “seguros”, lo que, según los expertos en salud, podría desencadenar una crisis de sueño inducida por el clima, además de enfermedades agudas y crónicas y problemas de salud mental.

El impacto del cambio climático en las noches cálidas

Climate Central, una organización independiente de científicos y comunicadores, realizó un análisis para evaluar cómo el cambio climático ha intensificado las noches calurosas y cuántas personas se ven afectadas anualmente. Los resultados son alarmantes:

• Aproximadamente 2.400 millones de personas al año soportaron al menos dos semanas adicionales de noches con temperaturas superiores a los 25 °C.
• Más de 1.300 millones de personas sufrieron al menos dos semanas más al año con temperaturas superiores a los 20 °C.

Estos datos refuerzan la idea de que el cambio climático, impulsado por la quema de combustibles fósiles y la deforestación, es el principal responsable de este fenómeno.

Cómo las noches más cálidas afectan la salud

Los especialistas en salud ya han demostrado que las noches con temperaturas superiores a 25 °C, 20 °C o incluso 18 °C pueden tener un impacto negativo en el sueño y la salud en general. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda mantener la temperatura nocturna en 24°C para garantizar un descanso adecuado.

Entre los principales efectos adversos de las noches cálidas se encuentran:

• Dificultad para enfriar el cuerpo: La incapacidad del cuerpo para recuperarse del calor diurno aumenta el riesgo de derrames cerebrales y enfermedades cardiovasculares.
• Pobre calidad y duración del sueño: Las olas de calor afectan negativamente el sueño, lo que puede tener consecuencias graves en la salud física y mental, desde la función cognitiva hasta el aprendizaje. El sueño insuficiente y de mala calidad también puede reducir la esperanza de vida y aumentar el riesgo de accidentes y lesiones.
• Efectos graves en grupos vulnerables: Los lactantes, adultos mayores y embarazadas son especialmente susceptibles a los efectos adversos de las noches cálidas.

Lisa Patel, pediatra y directora ejecutiva del Consorcio de la Sociedad Médica sobre Clima y Salud, enfatiza que “el mundo se está calentando aún más rápido durante la noche que durante el día, y nuestros cuerpos no están preparados para adaptarse”.