Cazadores furtivos matan a uno de los últimos yaguaretés en Formosa

Un crimen que amenaza la supervivencia de una especie en peligro crítico.

El yaguareté está al borde de la extinción en Argentina y su captura es ilegal. Sin embargo, un grupo de cazadores furtivos ha matado a uno de los cinco ejemplares restantes en Formosa.

El incidente tuvo lugar en Estanislao del Campo. El Ministerio de Producción y Ambiente de Formosa informó que los cazadores han sido detenidos y están bajo custodia de la justicia provincial.

Las autoridades confirmaron que el yaguareté asesinado era un macho adulto, identificado por primera vez en febrero de este año mediante cámaras trampa. La muerte del animal agrava aún más la crítica situación de la especie en Argentina. Tras el asesinato, se presentó una denuncia policial que llevó a la intervención del Juzgado de Instrucción y Correccional de Las Lomitas, bajo la dirección de Gabriela Soledad Plazas.

“Las primeras fotos del yaguareté muerto fueron claves para la investigación, lo que permitió la detención de los involucrados. Informamos que el caso está esclarecido respecto a los autores de esta trágica matanza de un animal protegido por leyes nacionales y provinciales”, declaró Plazas. En este contexto, la Administración de Parques Nacionales, dirigida por Cristian Hansen, emitió un comunicado solicitando que el caso sea transferido a la Justicia Federal para actuar como parte querellante en la protección del Monumento Natural Yaguareté.

Consecuencias legales para los cazadores

Los cazadores enfrentan penas estipuladas en los artículos 25 y 26 de la Ley de Conservación de Fauna, que varían de dos meses a dos años de prisión y una inhabilitación especial de cinco años. Estas penas pueden aumentar a cuatro meses a tres años de cárcel y una inhabilitación de diez años si la caza se realizó de manera organizada, con tres o más personas, o con medios prohibidos. Además, se impondrá una multa económica significativa basada en el daño ambiental causado.

En Argentina, el yaguareté está en peligro crítico, enfrentando un riesgo extremadamente alto de extinción en el futuro inmediato debido a la destrucción de su hábitat, la caza furtiva y la escasez de presas naturales. Es esencial denunciar la persecución y el comercio ilegal de estos animales para proteger esta especie emblemática.

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