#LaSexión: Tengo deseo de tener relaciones con otras personas pero no con mi pareja

por Lic. Noe Benedetto

Este deseo, que muchas personas consideran un tabú, es más común de lo que podríamos pensar y puede surgir inclusive en las relaciones que se consideran más estables y consolidadas.

El deseo sexual puede estar influenciado por múltiples factores biológicos, psicológicos y sociales. Las personas no están necesariamente programadas para la monogamia. La monogamia, tal como la conocemos, es un constructo relativamente moderno que viene con sus propias expectativas y presiones.

En la era actual, donde la esperanza de vida ha aumentado y las expectativas sobre el matrimonio y la pareja ideal se han elevado, mantener una relación cerrada a largo plazo puede ser más desafiante que nunca. La idea de que una sola persona debe satisfacer todas nuestras necesidades emocionales, sexuales e intelectuales es una carga pesada y, en muchos casos, poco realista.

Por otro lado, el deseo, se nutre de lo nuevo, lo desconocido y lo misterioso. En el contexto de una relación a largo plazo, la familiaridad y la rutina, aunque brindan seguridad y confort, pueden sofocar la llama erótica. La paradoja es evidente: buscamos seguridad y estabilidad en nuestras relaciones, pero al mismo tiempo anhelamos novedad y excitación. Este conflicto inherente puede llevar a que el deseo se dirija hacia fuera de la relación.

En una relación a largo plazo, es esperable que el deseo sexual fluctúe. Es importante destacar que sentir deseo o atracción por otras personas no necesariamente implica falta de afecto o compromiso hacia la pareja. Es totalmente posible amar a alguien mientras se siente atracción hacia otras personas. Por otro lado, las fantasías sobre otras personas son frecuentes y no necesariamente indicativas de un problema en la relación. Es crucial diferenciar entre fantasía y realidad y entender que tener pensamientos sobre otras personas no equivale a desear activamente estar con ellas.

Para algunas personas, la monogamia cerrada puede no ser la única opción viable, y las alternativas de las no monogamias consensuadas permiten explorar su deseo de estar con otras personas y sostener una relación principal.

Independientemente del tipo de relación que se elija, la comunicación asertiva es fundamental. Las personas deben sentirse seguras para expresar sus deseos, necesidades y preocupaciones sin temor a ser juzgadas o rechazadas.

Si sentís deseo de tener relaciones con otras personas fuera de tu pareja, hay un par de cuestiones a considerar:

• Reflexioná sobre tus sentimientos: Tómate el tiempo para reflexionar sobre tus sentimientos y las causas subyacentes de tu deseo. Comprender tus motivaciones puede ayudarte a tomar decisiones más informadas.
• Considerá la terapia individual: Un profesional de la salud mental puede acompañarte a abordar estos conflictos.
• Explorá alternativas: Recordá que cualquier tipo de cambio en la relación requiere comunicación, consenso y consentimiento.
• Trabajá en tu relación: Revisar la comunicación y la intimidad emocional y sexual en tu relación actual. La terapia de pareja puede ser una herramienta valiosa para ayudar a las personas a mejorar su comunicación y a explorar alternativas que puedan satisfacer ambas desde el consenso.

Es importante recordar que no hay una única forma de tener una relación. Lo que funciona para un vínculo puede no hacerlo para otro. La clave es encontrar un equilibrio que satisfaga a todas las partes.

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Los titulares se desprenden de las consultas que propone la audiencia en @lic.noeliabenedetto

El contenido publicado es solo a fines informativos y no pretende diagnosticar ninguna condición clínica, ni reemplazar el consejo de un profesional de la salud ni recomendar ningún tratamiento. Este espacio no suplanta a una consulta con un/a especialista.

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