Delega de una vez

Delegar es una de las tareas más difíciles pero necesarias de todo líder. Conlleva tiempo, entrenamiento, dedicación y sobre todo confianza.

En esta nota y episodio te ayudamos con el paso a paso para que puedas aprender a delegar y así tener más tiempo disponible para las tareas que realmente aportan valor a tu negocio y a tu vida.

¿Por qué no delegamos?

Existen varias razones por las cuales es difícil delegar tareas y estas son las principales:

• La falta de confianza en la capacidad de otra persona para realizar la tarea correctamente.
• La creencia de que nadie más puede hacerlo tan bien como uno mismo.
• La falta de tiempo para supervisar y monitorear el progreso de la tarea delegada.
• La falta de habilidades de comunicación y liderazgo para delegar efectivamente.
• La preocupación por el impacto en la imagen personal si la tarea no se realiza de manera satisfactoria.
• El miedo a perder el control sobre el resultado final.
• La falta de recursos o personas disponibles para asumir la tarea.

¿Te identificaste con algunas (o muchas) de ellas?

Si es así aquí te dejamos los pasos para aprender a delegar teniendo en cuenta de que se trata de un proceso CONTINUO:

• Identificar las tareas que se pueden delegar: Es importante identificar las tareas que no son críticas para el negocio o las que no requieren su experiencia y habilidades específicas para ser realizadas. Lo que recomiendo es hacer una lista de todas tus tareas y marcar con una letra “O” aquellas tareas que sean Operativas y con una letra “E” las que sean estratégicas y claves para el negocio
• Seleccionar a la persona adecuada: Es importante elegir a alguien que tenga la habilidad y el conocimiento necesarios para realizar la tarea.
• Establecer objetivos claros: Es importante establecer objetivos claros y medibles para la tarea delegada para que la persona responsable pueda entender lo que se espera de ella.
• Proporcionar las herramientas necesarias: Es importante proporcionar todas las herramientas y recursos necesarios para la tarea delegada para garantizar que la persona responsable pueda completarla exitosamente.
• Proporcionar retroalimentación: Es importante proporcionar feedback continuo sobre el progreso y el rendimiento para ayudar a la persona responsable a mejorar y para detectar y corregir problemas temprano.
• Asegurarse de no ser un micromanager: Es importante darle a la persona responsable la libertad para realizar la tarea a su manera, y no tratar de controlar cada detalle.
• Delegar autoridad: Es importante delegar autoridad junto con la tarea, para que la persona responsable tenga el poder de tomar decisiones y resolver problemas.
• Aprender a confiar: y quizás esta es la más difícil. Es importante aprender a confiar en la capacidad de otras personas para realizar tareas y tomar decisiones, esto ayudará a liberar tiempo y energía para enfocarse en tareas más importantes.

A medida que va pasando el tiempo y ya nos sentimos confiados hay que volver a empezar, y detectar nuevamente más tareas que podamos ir delegando.

El resultado: Menos estrés, más enfoque, mejor comunicación y sobre todo, más tiempo para hacer las tareas claves que generan más rentabilidad y más tiempo para disfrutar de las cosas que más te gusta hacer.

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