Síndrome de la vida ocupada
Si no podes parar puede que estés sufriendo el síndrome de la vida ocupada. ¡Es hora de poner freno a esa vida tan frenética!
Que levante la mano quien no ha repetido más de una vez la típica frase “¡Necesito más tiempo para descansar!”, pero cuando llega ese momento aprovechas cada minuto libre para poner en orden otras cosas del trabajo, la familia, la casa y un etcétera de cosas…la cuestión es estar ocupado y si da para hacer dos cosas a la vez, mejor.
En la era de las redes sociales, exponer un estilo de vida altamente productiva está glorificado por la sociedad. Lo que genera que sea muy fácil caer en el llamado síndrome de la vida ocupada
Síndrome de la vida ocupada
La expresión “síndrome de la vida ocupada” se atribuye al grupo de investigación CPS Research de Glasgow, que lo define como un ritmo de vida exigente, normalmente provocado por la situación laboral, que se caracteriza por una actividad excesiva de la memoria y hiperestimulación y que se acaba traduciendo en despistes, falta de concentración y olvidos.
¿Qué nos lleva a caer en el síndrome de la vida ocupada?
Ese afán de mantenernos continuamente ocupados suele alimentarse en primer lugar en la sociedad que nos impulsa y exige productividad ya que en general está un poco mal visto no estar ocupados.
Vivir en un entorno altamente demandante al que nos cuesta poner un límite también forma parte de esa vida frenética. Esto nos lleva a tener la sensación de estar en un entorno altamente estresante.
La baja tolerancia a la frustración es otra de las causas que nos impulsa a estar constantemente haciendo una y mil tareas.
¿Cuáles son los síntomas?
Mala memoria y falta de concentración
El síndrome de la vida ocupada afecta también nuestra atención. Cuando estamos constantemente haciendo cosas se reduce la capacidad de atención que podemos poner en lo que hacemos.
Depresión, estrés, ansiedad y hasta insomnio
El síndrome de la vida ocupada afecta principalmente a tu salud mental, generando que estés estresado, tengas síntomas de ansiedad y problemas para conciliar el sueño.
La depresión puede surgir cuando te privas de hacer ciertas actividades que son buenas para ti, cómo hacer ejercicios, ver a amigos, disfrutar de una películas entre muchas otras.
Multitasking
Las personas que padecen este síndrome trabajan en exceso, muestran una tendencia de realizar más de una tarea a la vez, sin tomarse un momento para descansar y caen en malos hábitos.
Desmotivación
Este podría ser el indicador más “sencillo” de identificar, porque no tienes espacio ni quisiera para disfrutar de los placeres de la vida, de conectar contigo mismo, por eso eventualmente el cansancio le irá quitando el sabor a lo que haces.
Posibles soluciones
Una de las mejores armas para ponerle freno al síndrome de la vida ocupada es el descanso. De ahí la importancia de pensar que cuando estamos desocupados también estamos siendo productivos, estamos cuidando de nuestra salud y teniendo la oportunidad de reflexionar sobre cómo hacer mejor todo lo que se nos presente.
Aunque estar ocupados constantemente no es del todo malo, por ejemplo, en ciertos momentos en los que tenemos preocupaciones grandes o nos vemos con mucha necesidad de ocupar nuestro tiempo. En este caso estar ocupados podría ser una buena estrategia, pero si lo necesitamos para no entrar en contacto con las cosas que nos pasan por dentro, es el momento de poner freno o buscar ayuda profesional.
Además es importante tomar conciencia de lo necesario que es estar desocupado en algunos momentos del día y sobre todo pensar en los riesgos que supone no estarlo.
Otro punto de partida también es preguntarnos: ¿tiene sentido que esté todo el rato haciendo estas cosas y que no dedique más tiempo a mi bienestar personal, a mis relaciones familiares, personales o a mi pareja?
Es importante ocupar una parte de nuestro tiempo en relaciones personales tan necesarias e imprescindibles para nuestra vida como hacer deporte, pasear, quedar con alguien y vivir el aquí y ahora.
+NOTIFY: Día Mundial del Alzheimer
+NOTIFY: Impulsan proyecto para que las prepagas incorporen atención por violencia de género